lunes, 6 de diciembre de 2010

Reseñas sin libro I

habida cuenta de la cantidad de libros que se publican en España; del desinterés de la crítica y hacia la crítica; del desinterés en general; de la paradójica ausencia, cercana a la negación, de la lectura del gran público u horda populacha; de otros motivos que ahora mismo se me escapan: considero importante dar comienzo a esta serie, intitulada "Reseñas sin libro", que recogerá interesantes recensiones de obras literarias, sin indicar en ningún caso de qué obra se trata, ni quién es su autor, ni quién realiza la crítica. amén.


De vez en cuando, es bueno que un poeta, que no tema el aire rarificado de las cimas, se atreva a elevarse por encima de lo vulgar para que, en un soplo épico, exalte nuestro hoy. Porque, no nos equivoquemos: esos valientes jóvenes que, en lo peor de la guerra, han intentado todo (en vano, ¡lástima!) para evitar el infierno argelino a un joven militar que pedía misericordia, son los verdaderos sucesores de Ayax y de Aquiles, de Hércules y de Telémaco, de los Argonautas, de los Tres Mosqueteros,e incluso del Capitán Nemo, de Saint–Exupéry, de Teilhard de Chardin... En cuanto a los lectores a quienes las virtudes de la epopeya dejen insensibles, encontrarán en este librito suficientes digresiones y paréntesis para obtener en ellas su placer, y en particular una receta de arroz con aceitunas que debería satisfacer a los más difíciles.

1 comentario:

Don Hirsuto dijo...

Sublime
Encantadora idea
Oh Señora
Encantadora
Y yo lo celebro tanto
Que yo lo celebré ya
Celebrérrimos nos hacemos
Si hay motivo REAL que celebrar
Y NO:
navidades

PD: Creo que ahora en el Corte Inglés puedes salvar tu alma en cómodos plazos si compras algo durante la semana fantástica! Güau!!